Iba como un dolobu tratando de calcular que debía comprar para que me devuelvan las monedas necesarias y así poder volver para mis pagos. Como un verdadero K-po había diseñado una cuenta para que el kioskero me tenga que devolver una monedita de un peso.
No solo eso me salio mal, la señorita que atendía el kiosco de la estación de servicio me demostró que comprando algo de 1 peso con un billetito de 10 no necesariamente me tenía que tocar un vuelto con monedas, nonono. Dos billetes de $2 y uno de $5 (san martín y la re.....). No tuve más remedio que ejecutar una sonrisa falsa, creo que cualquier gil se hubiera dado cuenta que no solo compré cualquier cosa, sino que deliberadamente quería llevarme monedas y me quedé con unos chicles de menta asquerosos. Decime... ¿Quién entra a un Kiosco a comprar 4 chicles con un billete de $10? Yo!, quien va a ser.
Me fui, comencé a buscar otro Kiosco, no podía volver y dejar en claro mi torpeza. Cuando me iba, escuché una frase que me llamó poderosamente la atención y despertó en mi carita de ángel una sonrisa complice como quien se ríe de la vergüenza de otros: "ME TENÉS LOS HUEVOS LLENOS FIONA!!"
No solo eso me salio mal, la señorita que atendía el kiosco de la estación de servicio me demostró que comprando algo de 1 peso con un billetito de 10 no necesariamente me tenía que tocar un vuelto con monedas, nonono. Dos billetes de $2 y uno de $5 (san martín y la re.....). No tuve más remedio que ejecutar una sonrisa falsa, creo que cualquier gil se hubiera dado cuenta que no solo compré cualquier cosa, sino que deliberadamente quería llevarme monedas y me quedé con unos chicles de menta asquerosos. Decime... ¿Quién entra a un Kiosco a comprar 4 chicles con un billete de $10? Yo!, quien va a ser.
Me fui, comencé a buscar otro Kiosco, no podía volver y dejar en claro mi torpeza. Cuando me iba, escuché una frase que me llamó poderosamente la atención y despertó en mi carita de ángel una sonrisa complice como quien se ríe de la vergüenza de otros: "ME TENÉS LOS HUEVOS LLENOS FIONA!!"
jajajaja te entiendo perfectamente, me pasó una vez, y sólo así aprendí que los kiosqueros parecerían estar entrenados en darle el vuelto necesario a giles como nosotros con la menor cantidad posible de monedas! jaja
ResponderEliminarUn abrazo! Muy bueno el blog, jaja, me encanta
NaChO